Estatuas vivientes disfrazadas de mariachisy representando a dos soldados de la revolución en Ciudad de México.
La Revolución mexicana conllevó varios cambios sociales. En primer lugar, los dirigentes porfiristas perdieron el poder político, aunque mantuvieron poderío económico, y las clases medias ingresaron a la administración pública. “Es el momento en el que nacen el burócrata, el funcionario, el líder […]”. El ejército abrió el sistema sociopolítico y pasó a ser la institución principal de la Revolución. Este ascenso puede observarse en el porcentaje de puestos gubernamentales ocupados por militares: en el gobierno de Madero fue de 0 % mientras que en el de Calles fue de 50 a 60 %. La nueva clase dirigente incrementó su poder económico a través de propiedad de bienes raíces y algunos negocios. Sin embargo, no se convirtieron en una burguesía que invertía su capital a largo plazo sino que más bien acumulaba bienes inmuebles y gastaba en diversión y ostentación.
Por otro lado, aunque la proporción de población rural y urbana y el número de obreros y de la clase media se mantuvieron prácticamente iguales, hubo cambios cualitativos en las ciudades. Grandes propietarios rurales se mudaron a las ciudades huyendo del desorden en el campo. Algunos campesinos también emigraron a las urbes, asentándose en los barrios de la antigua élite porfirista pero manteniendo su estilo de vida rural. El nivel de vida en las ciudades creció: pasó de contribuir 42 % al producto interno bruto en 1900 al 60 % en 1940. Sin embargo, la desigualdad social era profunda.
El cambio más marcado ocurrió entre la población rural. La reforma agraria permitió a los revolucionarios poseer tierras y surgió una nueva clase de ejidatarios. No obstante, la estructura de propiedad de la tierra no facilitó el desarrollo agrícola y empobreció a los campesinos. “De 1934 a 1940, los salarios reales bajaron 25 % en el campo mientras que los salarios obreros aumentaron en 20 %”. “Faltaba el pan, no había gran cosa que vender y menos aún que comprar. […] sigue la costumbre de dormir en el suelo, […] la dieta se limita al frijol, a la tortilla, al chile; el vestido es pobre”. Los campesinos pasaron a emigrar temporalmente a otras regiones y estados para participar en la producción de ciertos cultivos donde eran frecuentemente maltratados y explotados y sufrían de enfermedades. Otros pasaron a emigrar a Estados Unidos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario